El juicio a García Luna escala a la élite del sexenio y toca al expresidente mismo
Los señalamientos hechos el día de ayer por el exfiscal de Nayarit, Edgar Veytia, son los primeros en el juicio contra Genaro García Luna en los que se involucra y acusa directamente al expresidente Felipe Calderón Hinojosa, quien durante su administración declaró la guerra al crimen organizado y encargó gran parte de la estrategia a su Secretario de Seguridad, a quien criminales, expolicías y hasta agentes de la DEA han ligado con esas mismas organizaciones que decía combatir.
Ciudad de México, 8 de febrero (SinEmbargo).– El nombre de Felipe Calderón Hinojosa salió a relucir durante el juicio que enfrenta su Secretario de Seguridad y mano derecha, Genaro García Luna, cuando ayer el exfiscal de Nayarit, Edgar Veytia, aseguró que el exgobernador priista Ney González habría recibido la orden del entonces Presidente de proteger a Joaquín “El Chapo” Guzmán y al Cártel de Sinaloa.
Edgar Veytia se declaró culpable en enero de 2019 de cargos de distribución internacional de drogas en la misma Corte de Brooklyn donde es enjuiciado García Luna. En ese mismo lugar, dos meses antes, en noviembre de 2018, Jeffrey Lichtman, el abogado del “Chapo” Guzmán había asegurado al jurado que Felipe Calderón habría recibido sobornos millonarios por parte del Cártel de Sinaloa, una afirmación que el exmandatario calificó de “falsa y temeraria”.
Los señalamientos hechos el martes por Veytia son los primeros en los que se involucra directamente a Calderón Hinojosa, quien durante su administración declaró la guerra al crimen organizado y encargó gran parte de la estrategia a García Luna, a quien criminales, expolicías y hasta agentes de la DEA han ligado con esas mismas organizaciones que decía combatir. A lo largo del juicio han acusado al exsecretario de Seguridad de haber recibido sobornos y de reunirse con capos como Arturo Beltrán Leyva.
En la Corte de Brooklyn también ha sido mencionado el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) de esa administración, el General Guillermo Galván, de presuntamente haber recibido sobornos del narco. Un señalamiento que hizo la propia defensa de García Luna durante un interrogatorio a Óscar Nava Valencia, alias “El Lobo”, un viejo líder del Cártel del Milenio, sobre el cual no se han dado más detalles hasta el momento.
En el caso del expresidente Calderón, el exfiscal Edgar Veytia, conocido como ”El Diablo” o “La Bestia”, afirmó que su entonces jefe, el exgobernador Ney González y su sobrino se habían reunido en la Ciudad de México con el expresidente Calderón y el exsecretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, quienes le habrían indicado que se debía proteger a “El Chapo” y a sus socios del Cártel de Sinaloa.
“Que la línea era El Chapo”, afirmó escuetamente Veytia sobre el resultado de esa reunión a la que él no ingresó, ya que estuvo en un recorrido con Luis Cárdenas Palominos, exalto funcionario policiaco involucrado con el narco. Ante una objeción de la defensa, liderada por César de Castro, la asistente del Fiscal Saritha Komatireddy replanteó la pregunta y Veytia confirmó. “La orden era proteger a Los Chapos, no a los Beltrán Leyva”.
Ayer, también se contó con el testimonio del agente del FBI, José Moreno, quien habló de una redada llevada a cabo en 2012 contra “El Chapo” Guzmán a partir de una intervención a su teléfono, pero los agentes llegaron tarde al operativo y el líder del Cártel de Sinaloa escapó. La información, relató, se compartió con el excomandante de la Policía Federal, Iván Reyes Arzate, quien en octubre de 2021 se declaró culpable de haber colaborado con el narco mientras simulaba un combate al crimen organizado con la DEA.
Pese a los señalamientos que han pesado desde el pasado contra García Luna y su círculo cercano, el expresidente Felipe Calderón siempre ha negado haber sido consciente de ello. Ahora, el expresidente ha sido involucrado directamente.
“Me he reservado opinar sobre el juicio al ing. García Luna hasta que concluya. Por ahora niego categóricamente las absurdas declaraciones que reporta la prensa que hizo hoy el testigo Veytia. Lo que señala sobre mí es una absoluta mentira. “Nunca negocié ni pacté con criminales”, respondió el expresidente un par de horas después de que se diera a conocer el testimonio del exfiscal de Nayarit.
En diciembre de 2009, Arturo Beltrán Leyva fue abatido durante un enfrentamiento con la Marina mexicana en Cuernavaca, Morelos. El cuerpo del capo fue exhibido con billetes colocados encima, algo que en su momento fue cuestionado. A inicio de ese mismo año, “El Chapo” Guzmán apareció entre los hombres más ricos del mundo Forbes, un puesto que repetiría en 2010.
Meses después sería detenido Édgar Valdez Villarreal, alias “La Barbie”, un hombre que espera que testifique en la Corte, y quien en noviembre de 2012 acusó a través de una carta a Genaro García Luna, aún titular de la Secretaría de Seguridad Pública federal, de recibir dinero de los grupos criminales, y al Presidente Felipe Calderón, quien estaba a dos días de terminar su sexenio, de pactar con los capos de los cárteles del narcotráfico.
Otros testimonios de militares, policías y hasta de la Iglesia señalan que Calderón Hinojosa fue advertido sobre los supuestos vínculos de su Secretario de Seguridad. Dos de quienes expusieron esto, el General Tomás Ángeles Dauahare y Javier Herrera Valles, quien fuera Coordinador de Seguridad Regional de la Policía Federal Preventiva, fueron arrestados con cargos inventados, como ellos mismos han denunciado. García Luna continuó hasta el final de ese sexenio al frente de la estrategia de seguridad.
“Señor Presidente, lo más preocupante para la Seguridad Pública de nuestro país es que el Ing. García Luna continúa sin dirección en la Policía, mintiéndole a usted y a la sociedad haciéndole creer en una coordinación entre PFP y AFI que no existe, siendo ampliamente comentado por los diferentes medios de comunicación”, escribió Javier Herrera en una carta enviada a Felipe Calderón el 15 de febrero de 2008.
En tanto que el General en retiro Tomás Ángeles Dauahare narró durante el documental Guerra Híbrida, producido y dirigido por Daniel Marmolejo, que en una reunión con Calderón, el 9 de mayo de 2007, le alertó de García Luna, luego de que el entonces mandatario panista le hizo preguntas sobre el Secretario de Seguridad.
“Le dije: ‘Señor Presidente, le voy a decir mi verdad, es mi verdad, no lo voy a engañar a usted ni a mis jefes […] porque mi comentario puede generar decisiones dañinas para el país’. Le di mi versión, me lo pidió por escrito. Días más tarde se lo hice llegar. ¿Qué le dije? El involucramiento de García Luna en el narcotráfico y en otras cosas. El tema importante es el del narcotráfico. Estaba enterado. Ese mismo día, ya después de eso, platicando él y yo solos, de pie a un lado de su escritorio —me refiero al licenciado Calderón—, ahí le dije que su estrategia estaba mal y por qué estaba mal”, contó el General Tomás Ángeles.
Los dos pasarían años en prisión luego de sus denuncias.
DEL “DIABLO” A “MOREIRA”
El juicio contra Genaro García Luna ha generado expectativas por lo que puedan declarar los testigos cooperantes en relación a la administración del expresidente Felipe Calderón. Sobre todo por las diversas alertas que existieron sobre la colusión de su mano derecha con el crimen. En la semana número tres del juicio, el testimonio del exfiscal Edgar Veytia dio un giro cuando ligó directamente al exmandatario.
El “Diablo” también narró que Luis Cárdenas Palomino —otro de los super policías de Calderón y también acusado en Estados Unidos— le habría dicho que él estaba “del lado equivocado y con el bando contrario por proteger a los Beltran Leyva”. “Nos dijo que era a El Chapo a quien debíamos apoyar”, sostuvo Veytia.
El pasado 30 de enero, se dio a conocer que la Fiscalía de Brooklyn le pidió al Juez Brian Cogan que impidiera que la defensa cuestionara sobre “ciertos hechos” a Édgar Veytia. “El Gobierno [la Fiscalía] se mueve para evitar que la defensa le pregunte a Veytia sobre los hallazgos adversos de credibilidad de varios brazos del Gobierno federal y la decisión relacionada de no ofrecerle un acuerdo de cooperación”, indica un documento judicial.
Los detalles de la petición se mantuvieron bajo sello, pero se tuvo conocimiento que los fiscales estadounidenses buscaban bloquear acciones de la defensa de García Luna contra el testigo cooperante, quien fue defendido en su momento por Jeffrey Lichtman, el mismo abogado de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera y su esposa, Emma Coronel.
Esta semana también revivió la polémica relación y enfrentamientos que sostuvieron el expresidente Felipe Calderón y el exgobernador de Coahuila, Humberto Moreira. El exmandatario estatal fue nombrado y acusado por su extesorero: Héctor Villareal Fernández, quien habló de un saqueo de 200 millones en el que implicó a su jefe.
Humberto Moreira, exonerado del delito de enriquecimiento ilícito por la Procuraduría General de la República de Felipe Calderón y por la Procuraduría de Justicia estatal de Coahuila de su hermano, Rubén Moreira Valdés, en 2015, respondió a las acusaciones de Héctor Villareal utilizando las discrepancias y enfrentamientos mediáticos que ha sostenido con Calderón.
“Por todos es conocida las discrepancias que mantuve, mientras ejercí como Gobernador, con Felipe Calderón. Junto al fallecido Gobernador de Colima, fuimos los únicos responsables políticos que no firmamos el desplegado de gobernadores que reconocía su triunfo en la Presidencia de la República por lo que se hace del todo impensable que sostuviera una relación cercana con su principal colaborador, el señor García Luna”, escribió Humberto Moreira en una carta enviada este lunes al periódico Vanguardia.
La enemistad de Humberto Moreira contra el expresidente Felipe Calderón —e incluso contra su propio hermano, el también exgobernador y actual legislador, Rubén Moreira— se exacerbó, luego del asesinato de su hijo José Eduardo, de 25 años, el 3 de octubre de 2012 en Ciudad Acuña.
“Mi hijo viene a ser uno de los muertos de esta guerra”, dijo el exgobernador en ese momento. Humberto Moreira también ha acusado que el crimen fue por una venganza de los Zetas contra su hermano, debido a que la policía estatal asesinó al Z-40, uno de los presuntos líderes de los Zetas.
En noviembre de 2012, poco tiempo antes de concluir el sexenio de Calderón, Humberto Moreira llevó a la Corte Penal Internacional de La Haya, una serie de periódicos y documentos que presentó como comunicaciones donde acusa al expresidente de México por los más de 100 mil muertos que hasta ese momento había dejado la guerra contra el narcotráfico.
La evidente rivalidad y hostilidades entre ambos tuvieron su punto más álgido en el año 2017, periodo electoral en que varios medios de comunicación confirmaban que la PGR de Calderón sí había investigado a Moreira.
En marzo de 2017, Calderón Hinojosa acusó a Moreira de permitir la presencia de Los Zetas en Coahuila.”Me consta, porque yo sé que quizá el grupo delincuencial más peligroso y más cruel que haya azotado a Coahuila y a México es el grupo de Los Zetas y, cuando estaba el Gobernador Humberto Moreira, todos los cabecillas de Los Zetas vivían cómodamente en el estado de Coahuila, aquí vivía Lazcano, aquí vivía Miguel Treviño ‘el Z40’, aquí vivía el ‘Z42’, todos cómodamente”, dijo Calderón en un evento público el 27 de marzo de 2017.
Moreira Valdés, por su parte, publicó el 9 de abril de 2017, un spot de campaña en el que llamó “borracho” a Felipe Calderón Hinojosa. “Salió el borracho, Calderón como siempre. Este hombre aparece en todos lados, siempre ebrio y cometiendo errores. Su estado de ebriedad actual obedece a que su conciencia no lo deja tranquilo de todas las muertes y desapariciones de mexicanos que tuvo (durante su sexenio)”, dijo en ese entonces.
En ese mismo mes, se confirmó que la PGR de Felipe Calderón había investigado a Humberto Moreira por enriquecimiento ilícito, pero la indagatoria no prosperó porque la misma corporación lo exoneró, un mes antes de que concluyera el sexenio calderonista.
El 22 de abril de 2017, siendo aún candidato a la presidencia por Morena, Andrés Manuel López Obrador, reveló una copia certificada del documento de la Procuraduría General de la República (PGR), en el cual se comprobó la exoneración de Moreira, la cual, dijo López Obrador mostraba “la falsedad y simulación que impera en la cúpula del poder, que prueba que PRI y PAN son lo mismo”.
Frente a las acusaciones de Héctor Villarreal de esta semana, Calderón —que por años no desaprovechaba una oportunidad para acusar a Moreira de estar vinculado con los Zetas— no emitió ninguna opinión, como lo venía haciendo sobre el juicio de su mano derecha de García Luna, hasta que ayer no pudo alargar ese silencio cuando fue involucrado directamente con uno de los cárteles que su Gobierno decía combatir.