rmando Bartra es un prolífico escritor que simpatiza con la izquierda. Por ello, no es casual que el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) lo cite en sus conferencias matutinas en Palacio Nacional como una voz autorizada que sabe de lo que habla. Filósofo, sociólogo, e investigador del campo, sus más de 30 libros y 300 artículos periodísticos, de análisis y divulgación lo avalan como un experto de larga trayectoria.
A sus 81 años de edad, Bartra continúa escribiendo y se mantiene activo en la docencia e investigación en la Universidad Autónoma de México (UAM).
En la pasada Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL) 2022 presentó sus más recientes obras: Exceso de muerte: de la peste de Atenas a la Covid-19 y Magón: un anarquista en la revolución mexicana, editados los dos por el Fondo de Cultura Económica (FCE).
Su presencia en el máximo evento literario no pasa desapercibida, la gente se le acerca y él se da el tiempo de saludar, de contestar preguntas y firmar autógrafos. Recibe a Polemón en el stand de la editorial y nos invita cordialmente a sentarnos con él en la mesita donde despide al último de sus lectores.
Cierta agitación política envuelve a la capital del país. El domingo 27 de noviembre en que se llevó a cabo esta conversación, López Obrador conduce una marcha hacia el Zócalo de la Ciudad de México para conmemorar el cuarto año de su gobierno. Pero el día previo, la Expo Guadalajara es tomada por una facción de diputados, regidores y servidores públicos emanados de Movimiento Ciudadano (MC) que deliberadamente intenta irrumpir la inauguración de la FIL de forma violenta.
Se trata de un conflicto local por la disputa del presupuesto público entre el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, y el líder político de la Universidad de Guadalajara, Raúl Padilla López. El incidente le resulta poco atractivo. En cambio, se explaya profusamente con el tema de la covid, un virus que coqueteó con él, pues al tener 81 años, presión alta y ser sobreviviente de cáncer, se convertía en un serio aspirante a abandonar el plano terrenal.
Especialmente, Bartra habla de lo que ha significado la 4T para él y la población que votó por el gobierno de AMLO, una vuelta a la esperanza, después de poco más de 30 años de gobiernos neoliberales.
La oposición no pasa inadvertida para el filósofo, una oposición, que dice, da “mucha pena” y con tan “pocos argumentos”, lo que hace pronosticar que se prevé una transición tersa en el 2024 a favor de Morena.
AMLO y la pandemia
Polemón: Quisiera preguntarle algo respecto a su libro, donde menciona la crisis provocada por la Covid-19, prácticamente en todo el mundo ¿Cree usted que el gobierno de AMLO enfrentó adecuadamente la pandemia?
Armando Bartra: La forma de evaluarlo es la respuesta de un sistema de salud a un reto inesperado. El mundo entero se enfrentó a un reto que no podía esperar. Sabíamos que iba a haber pandemia, había habido ya, sabíamos que iba a haber mutaciones de virus, había habido ya y no podíamos saber ni cuándo, ni cómo, ni de cuál magnitud, ni qué tipo de daño iba a causar. Por lo tanto, todos fuimos sorprendidos.
El mundo entero fue sorprendido y esto por lo cual los sistemas de salud, los que existían ante el reto de enfrentar algo inesperado de una magnitud que no sabíamos cuál iba a ser y hubo respuestas diferentes en el mundo, diferentes estrategias. Hoy todavía, si lees la prensa, verás que en China se sigue debatiendo una estrategia de ellos que es la estrategia de contagio cero. O sea; ellos son capaces de parar poblaciones de varios millones y decir no: nadie se mueve, nadie sale, nadie entra con tal de evitar el contagio.
Otras estrategias han sido las de tratar de mantener el contagio, pero más lento, en general son las que predominaron en el mundo. La lógica de va a haber contagios, no podemos hacer departamentos, va a haber contagios, tratemos de que estos no sean tan rápidos para que los podamos manejar, para que el sistema hospitalario pueda manejar. En China evitaron los contagios y ha tenido menos contagios que en otros sitios porque aislaron.
Armando Bartra: En ningún otro lugar del mundo se ha hecho. México y casi todos los demás países, lo que hicieron fue hacer más lentos los contagios y funcionó. En ese sentido, yo puedo decir la estrategia que aplicó México fue la estrategia correcta, no tratar de evitar que hubiera contagios, sino tratar de evitar que fuera explosivo ¿Por qué tratar de evitar que sea explosivo? porque en México y en cualquier lugar del mundo, pero muy particularmente en países como México, la capacidad hospitalaria no puede enfrentar ni siquiera la demanda normal, mucho menos una demanda extraordinaria. Teníamos el problema de un sistema de salud que está de por sí saturado en general para las enfermedades convencionales y enfrentado al reto de una pandemia, México no podía responder si no hacíamos más lentos los contagios. Se hicieron más lentos.
Segundo: de todos modos, no puedes responder porque no tienes la capacidad instalada para el tipo de enfermedad que estás enfrentando, que en este caso es una enfermedad que se inicia en vías respiratorias, no tienes especialistas suficientes, no tienes camas suficientes, no tienes los recursos suficientes, hubo que adoptarse de recursos suficientes. En ese sentido creo que también hubo una respuesta eficaz, no sé si lo sepas, pero bueno, en México no teníamos camas para incubar a los pacientes graves y no digo que se vayan a salvar, pero hay posibilidades de salvarlos si se intuban y si no los puedes intubar se te mueren y ¿Cómo le hacías? Compras esas camas, no había, en el mundo entero, en el planeta entero no había camas de este tipo, no porque no existieran, sino que estaban completamente saturados y nadie vendía esas camas. El Conacyt recibió la instrucción de fomentar la producción de estas camas de que se hicieron camas para intubar pacientes; en meses tuvieron las camas, un diseño mexicano y se están ya produciendo camas y exportando camas. En ese sentido se respondió a un problema, había una carencia, no alcanzaban las camas y hoy ya tenemos camas y las estamos exportando.
Armando Bartra: El otro tema, las vacunas: el mundo no tenía vacunas porque no se sabía cómo era ese virus, se empezaron a crear las vacunas y ciertos países y ciertas empresas muy grandes Johnson and Johnson, AstraZeneca fueron capaces muy rápido de producir vacunas. Había países con capacidad instalada para producirlas o replicarlas, otros no tenían esa capacidad. Había países capaces de crear sus propias vacunas, otros no tenían esa capacidad. México había sido un país productor de vacunas, la vacunación mexicana que es bastante buena, el sistema de salud no, pero la vacunación sí ha sido históricamente bastante buena, era con vacunas producidas en México, no diseñadas en México, pero sí producidas. Se desmanteló la producción de vacunas. Estábamos importando las vacunas convencionales. Hoy se dio instrucción de volver a producir vacunas y hay una vacuna para el covid, mexicana, que se llama Patria que parece ser que va a funcionar, podría no funcionar, podría ser que no pasara los últimos análisis.
Entonces tenemos: no había camas, se producen camas de diseño nacional, no había vacunas, empiezan a producir vacunas de diseño nacional. En ese sentido me parece que se respondió bien y finalmente el tema decisivo, a menos que tú puedas aislar a millones de personas, lo que tienes que hacer es vacunarlas, es lo único que va a permitir controlar la enfermedad, no vas a evitar que se contagien, vas a evitar que se agraven y se mueran y esto significa no vacunar a unos cuantos millones, sino vacunar a 70 millones de personas, 80 millones de personas que no puedes empezar por lo fácil, porque lo fácil es vacunar en las ciudades.
Una semana tú vacunas a 20 millones, 30 millones de mexicanos en las ciudades, pero resulta que vas a tener a 70 millones de mexicanos en los pueblos chicos que no vas a vacunar sino hasta el final y son gente que está en lugares donde no hay hospitales. Los tienes que empezar a vacunar por la gente que está más lejos y la vacunación más lenta, tú llegas a un pueblo donde hay tres viejitos, tienes que vacunar a tres viejitos y luego irte 30 kilómetros más adelante en terracería para vacunar a otro viejito que a lo mejor ya se murió.
Bueno, se empezó con los viejos, se empezó con las comunidades más remontadas, luego como todos sabemos pasaron a edades un poco menores y hoy ya se vacunaron también a los niños. En ese sentido estuvo bien. Te hablo ahora de una experiencia personal porque el covid no es algo de lo que uno estudie o reflexione o se informe si no es algo que uno padece. Yo fui vacunado soy una persona de 81 años.
Me vacuné en la primera jornada de vacunación en la Ciudad de México donde yo vivo. Puedo decir que la vacunación fue una fiesta y eso de decir que en plena pandemia cuando la gente se está muriendo, un acto médico, una vacunación es una fiesta, es una celebración, es duro, es fuerte, es difícil, no he escuchado una referencia parecida. Tengo amigos que se vacunaron en Estados Unidos y era una relación completamente fría, técnica, llenas este papel, pasas aquí. En México fue otra cosa, llegábamos los viejos, las gentes de mayor edad, 65 años para arriba, con sillas de ruedas, algunos con andaderas, con el bastón, con el pariente que te ayudaba, lampareados como conejos, lampareados, es decir, no habíamos salido al sol durante semanas y de pronto estabas en la calle otra vez, estabas junto con gente, habías estado con tus familiares y nada más, y de pronto estabas rodeado de jovencitos de jovencitas que te saludaban que bailaban que cantaban que hacían música, que te vacunaban.
Y la gente sintió, alguien me lo dijo: somos viejos, sabemos que nos vamos a morir pronto. Pero de pronto, después de ser vacunados, dijo, sentíamos que éramos inmortales, los viejos vacunados de pronto sentíamos como si fuéramos inmortales, nos habías librado de la muerte.
Bueno, esas son experiencias, algunas personales y otras que me hacen pensar que en México se manejó razonablemente bien con una pandemia que nadie sabía cómo se iba a comportar, con un sistema de salud muy deteriorado y que estaba en transición hacia una modalidad diferente. O sea, estás a medio camino de un proceso de transformación con un sistema muy deteriorado y de pronto se te viene una emergencia. Es el peor de los escenarios posibles.
Linchamiento mediático
Polemón: Sin embargo, hay algunos medios de comunicación que pareciera que hicieron una campaña de linchamiento…
Armando Bartra: No pareciera, sin duda hicieron una campaña de linchamiento, sin duda, pero podríamos haber tenido otro fenómeno, podría haber habido una erupción del Popocatépetl, por ejemplo, y entonces habría habido un desalojo de las poblaciones de la zona del volcán.
Y la ubicación de las mismas en algunas comunidades en donde iban a ser recibidas en los estadios o en los campos de fútbol y habría habido una campaña de linchamiento y podíamos haber perdido en el fútbol y habría una campaña en linchamiento y podía haberse el presidente de la República no boleado los zapatos un día y habría una campaña de linchamiento, porque va a haber campañas contra este gobierno, porque es una política que las haya.
Armando Bartra: No podemos juzgar lo bien o mal que se manejó un problema médico que hay que hacerlo con seriedad y con un balance profesional que no podemos juzgarlo a partir del hecho de que haya o no haya campañas de linchamiento, porque las campañas de linchamiento han sido sistemáticas.
En México tenemos una guerra de medios, es así, no estoy tomando partido, estoy diciendo esto es un hecho objetivo y entonces es muy difícil juzgar, cómo va la agricultura mexicana a partir de lo que dicen los medios, cómo va la cuestión de la atención de la pandemia a partir de lo que dicen los medios. Lamentablemente los medios en México están no politizados porque siempre lo han estado y eso no es malo, sino cargados de modo tal que no hay objetividad y es un problema grave, ni modo, así es.
La marcha 4T
Polemón: Quisiera preguntarle algo que no puedo dejar de lado, el 27 de noviembre salió Andrés Manuel a encabezar una marcha en la Ciudad de México para celebrar cuatro años de gobierno. En este sentido yo le preguntaría ¿Qué apreciación tiene de la marcha y de estos cuatro años de gobierno?
Armando Bartra: Sí, no salió Andrés Manuel a manifestarse, salieron más de un millón de mexicanos y mexicanas a manifestarse con el presidente de la República. El presidente de la República es uno, y del presidente de la República van a salir las referencias: el presidente de la República obligó a que los mexicanos y los mexicanos marcharan; el presidente de la República forzó a que los que dirigen la Guardia Nacional forzaran a los de la Guardia Nacional vestidos de civil para que marcharan. Ya lo leí, no lo estoy inventando, este, los funcionarios públicos tenían burócratas a su servicio, los obligaron a marchar, tenían acarreados, todo eso ya sabíamos lo iban a decir antes de que sucediera. No había ocurrido la marcha cuando ya lo estaban diciendo. La marcha es una manifestación de que hay un número muy grande de mexicanos, dispuestos a apoyar la Cuarta Transformación. Nos puede parecer bien o mal la 4T, lo que no podemos es negar, hay un enorme número de mexicanos dispuestos a marchar a favor de ella.
Polemón: ¿Qué apreciación tiene de estos cuatro años de gobierno? ¿Qué ha hecho bien o mal AMLO?
Armando Bartra: Lo que te puedo decir y es algo de lo que estoy absolutamente convencido es de que este sexenio, cualquiera, pero este sexenio que implicaba un cambio de gobierno concebido como un cambio de régimen, requería forzosamente generar una expectativa, una esperanza. Tú no puedes hacer un cambio de gobierno, en este caso de un partido a otro, pero además que pretende ser un cambio de régimen, no solo un cambio de gobierno y que además pretende entrar en una nueva etapa de la historia de México.
Todas estas pretensiones, una nueva etapa en la historia de México, un cambio de régimen con un cambio de gobierno, no lo puedes hacer sin generar en la población una esperanza, si no, no la haces. No es el problema de si logras que mejore el nivel de vida de la gente, no es el problema de si elevas los salarios mínimos o no. No es un problema de si logras suficiencia alimentaria o no, es, logras o no logras mantener la esperanza de la gente. Te puedo afirmar categóricamente y la hay, una recuperación de la esperanza de la gente porque lo está haciendo bien el gobierno, porque lo está haciendo mal el gobierno sería otra entrevista y tendríamos que analizar parte por parte de la política económica, tendríamos que analizar la política de salud.
Tendríamos que ver la política cultural y podrían ser una evaluación objetiva, en otros términos. Este es un cambio de gobierno que ha generado esperanzas en la mayoría de la población, tiene un 60 y tantos por ciento de aprobación del presidente a los cuatro años. Nunca ha sucedido en la historia de México y en la historia del mundo en América Latina. Si vas a tener un gobierno de cuatro años, a los dos años ya tienes menos del 50 por ciento. Hoy tienes a los 4 años faltando dos, más del 60 por ciento. La gente tiene esperanzas. Si yo fuera antiobradorista furibundo, si yo creyera que la Cuarta Transformación es una barbaridad y que todo lo que está haciendo el gobierno está mal, y fuera yo objetivo, tendría de todos modos que decir: y sin embargo ha logrado mantener la esperanza de la gente.
Polemón: Y faltan dos años más de gobierno.
Armando Bartra: Quedan, son dos formas de decirlo, tú dices faltan, yo digo quedan, todavía nos faltan dos años, todavía nos faltan dos años.
Polemón: ¿Se vislumbra una lucha encarnizada por la sucesión presidencial?
Armando Bartra: No, para nada, va a ser completamente terso.
Polemón: ¿Qué vislumbra usted rumbo al 2024?
Armando Bartra: Hay ahorita tres candidatos todos ellos de Morena, que ya dijeron yo aspiro a ser presidente de la República esos tres candidatos, están desarrollando un trabajo que pueden hacer y deben hacer como políticos que, es decir, yo como candidato lo que planteo y lo que ofrezco es esto, esto y esto, es decir, no transformar la campaña electoral en un proceso de última hora en la que en unas cuantas semanas a partir de un gasto enorme de propaganda y llenando de pancartas y de inserciones publicitarias se hace una campaña, está haciendo una campaña por dos años por delante.
Esto quiere decir que va a haber tiempo suficiente para conocer a esos tres candidatos, dos candidatos y una candidata, las otras fuerzas políticas de este país, las que podríamos llamar las oposiciones también tienen dos años para generar sus candidatos, algunos están tratando de decir, yo puedo ser un candidato, otros no están apareciendo, hay mucho tiempo, en ese tiempo yo creo que lo va a ocurrir es que los tres candidatos del partido hoy en el gobierno que son los candidatos de Morena, son tres, que son Adán, que son Marcelo, y que son Claudia, van a seguir haciendo su precampaña y cuando se acerque el final se va a ser una encuesta, se va a definir cuál de los tres va a quedar, y los otros dos, los que no quedaron van a decir, bueno, nosotros apoyamos al que sí quedó o a la que sí quedó. Y lo que va a suceder en el 24, es que va a ganar terso, tranquilo, lo que no va a haber es choque de trenes porque no hay oposición, o sea, justo.
La oposición
Polemón: Justo eso quería preguntarle, ¿Cómo ve a la oposición?
Armando Bartra: Muy mal, me da mucha pena porque yo creo que un país democrático, un país civilizado es un país donde las diferentes visiones de futuro y los diferentes proyectos del país se tienen que confrontar y yo no creo en las aplanadoras, yo no creo en el pensamiento monolítico, yo no creo en estrategias excluyentes y necesitas entonces oposiciones de diferentes signos que puedan ser dialogantes y que puedan presentar sus argumentos.
En México lo que tú mismo has dicho, es de campañas en contra del presidente por cualquier motivo, de campañas en contra de lo que está pasando en el país con cualquier motivo y muy poca propuesta y en dos años que quedan, las oposiciones, cualquiera, el bloque de oposición, genera una propuesta, una propuesta de país y generan candidatos creíbles, tendremos no solo una transición tersa sino una transición diríamos políticamente interesante.
Pero como van las cosas, vamos a tener una transición tersa, sin interés político porque no hay discusión política real, eso es mi opinión, lamentable, o sea, yo quisiera una oposición inteligente, una oposición con la que se pueda discutir cualquiera que sea, puede haber una oposición de izquierda, hay corrientes a la izquierda y López Obrador y de la cuarta y hay corrientes a la derecha diríamos si es que seguimos con los signos políticos.
La izquierda tiene tan pocos argumentos y si no, acusaciones. Y la derecha igual, acusaciones y no argumentos. Es lamentable, es lamentable porque esto se presta para que, en efecto, la corriente dominante, la corriente que hoy tiene claramente la mayoría de la población seguramente va a ganar la elección del 24, pues se vaya con la finta o se vaya de boca, pues, o sea, si tú no tienes algo que te haga resistencia te vas solo y eso es malo, es malo para el país.
Polemón: Pero sí ha habido tensión en algunas iniciativas de reforma que ha impulsado el presidente como, por ejemplo, esta reforma electoral que sigue atorada y que ha habido una reacción bastante virulenta de parte del sector conservador.
Armando Bartra: Pero no es una reforma, hay una corriente, hay una digamos, pues una derecha que dice hay que reformar el sistema electoral para que sea mejor, no, lo que hay, es hay una propuesta de reforma del sistema electoral por parte del gobierno y hay una derecha que dice que no se toca.
Polemón: ¿Y usted qué piensa?
Armando Bartra: Pues que me parece terrible que tú tengas una corriente de colisión que lo que dice es que no se toca, o sea, nadie, nadie en este país razonable, mínimamente razonable, puede decir que el sistema electoral no es mejorable, no es perfectible, el sistema electoral mexicano es perfectivo y tenemos una posición, la del presidente que dice hay que cambiar esto y esto. Podemos estar de acuerdo o no, y lo que tenemos, una derecha que dice no lo toquen, déjenlo cómo está. Está bien, no está bien, pero está porque es muy peligroso, que lo cambien. Bueno, ¿Qué es lo que está pasando? No tenemos una postura de la derecha, la derecha tiene que decir, el cambio en el sistema electoral que nosotros proponemos es este y el cambio en el sistema electoral que propone el señor presidente es este, vamos a ver cuál gana, lo que tú tienes es una propuesta de transformación electoral y una posición intransigente de la derecha así, no es deseable.
Polemón: Y utilizan palabras de alto impacto, “riesgo”, “peligro”, “concentración de poder”, “dictadura”. Están ahí, tratando de convencer a la población de que es peligroso.
Armando Bartra: Pero qué de raro tiene, si tú tratas de quitarle a un personaje que tiene credibilidad, la credibilidad. Dicen de él que es peligroso, dices de él que es autoritario, dices que sé yo, que es excluyente, que él es torpe, lo que sea, las palabras, las que sea, serán aquellas que funcionan para tratar de bajar la credibilidad de un personaje, el problema con las derechas es, no que utilice palabras duras, fuertes, sino el problema es que no usa otra cosa más que palabras duras o fuertes. Es francamente ridículo, o sea, tú no puedes decir, López Obrador es un criminal, tiene una responsabilidad criminal porque en el manejo de la pandemia se cometieron varias barbaridades que murió gente. Entonces hay que meter a la cárcel a López Obrador y hay que meter en la cárcel al secretario de Salud porque (Jorge) Alcocer, y hay que meter a la cárcel a Hugo López porque son unos asesinos ¡No puedes decir eso! Pero lo han dicho, tienes que probarlo, lo menos que puedes hacer es probarlo, porque si no, no son más palabras al aire.
Pacificar al país
Polemón: Quiero hacerle una última pregunta. Obviamente el tema de la de la inseguridad es algo que preocupa a la población ¿Cree usted que el gobierno de AMLO podrá pacificar el país?
Armando Bartra: Él ha estado presente en las calles durante toda la historia de México. El Ejército no ha dejado de estar en las calles, cumpliendo funciones que no son estrictamente militares, sino que son también funciones de seguridad pública. El Ejército siempre ha sido utilizado para enfrentar situaciones de desastre, el Ejército fue utilizado para la vacunación y el Ejército fue utilizado y sigue siendo utilizado para enfrentar al crimen organizado que tiene una capacidad de fuego que requiere del Ejército para enfrentarlo. El Ejército fue utilizado para reprimir a la población, a mí me tocó personalmente, el Ejército fue utilizado para reprimir a la población del movimiento estudiantil del 68, el Ejército fue utilizado para reprimir en la población de Guerrero que protestaba y obligó a algunos a que se levantarán en armas, como Genaro Vázquez y Lucio Cabañas.
Hoy el Ejército está siendo utilizado para enfrentar al narcotráfico y no para reprimir a la población, es una diferencia. Gracias a que el PRI se separó de la oposición, el Ejército podrá seguir operando como complemento durante un tiempo y que siga rindiendo cuentas de lo que hace.
Armando Bartra: El tema de la Guardia Nacional es que tú no puedes crear una Guardia Nacional de un día para otro cuando no tienes gente entrenada. Cuando no tienes gente capacitada y no tienes cuarteles. La Policía Federal no tenía cuarteles y se alojaba en hoteles y luego los hoteleros estaban protestando porque no pagaban, es decir, era ridículo, la fuerza pública tenía que alojarse en hoteles privados y no pagaba.
Hoy se están construyendo cuarteles, se están construyendo instalaciones, algún día estarán, no sé si estén en los lugares adecuados o no estén en los lugares adecuados, se está construyendo una Guardia Nacional en un país donde tenemos en efecto una situación de criminalidad insostenible, insoportable, y además tenemos un narcotráfico que no cede, no ha cedido, pues hay que reconocer que es evidente que no ha cedido.
El chiste es crear las condiciones para que ceda. Hay dos estrategias y eso es lo que está a discusión en este país. Yo creo que ya no está a discusión, ya se ganó, una es la estrategia de la guerra. Vamos a tratar de matarlos a todos, así de sencillo ¿Cómo vamos a acabar con el narcotráfico? Los vamos a matar, y luego vamos a matar a los jefes y luego vamos a dejar que se maten los unos a los otros y cuanto más se maten los unos a los otros, y más jefes podamos matar, más rápido vamos a acabar con el narcotráfico. Todos sabemos que no es así, el narcotráfico se reproduce como el cáncer y tú puedes matar a los jefes, y salen otros jefes y no se pueden matar los unos a los otros porque matan inocentes, entonces lo que hay que hacer es otra cosa.
Este gobierno está haciendo otra cosa diferente, esta otra cosa no es magia, no va a avanzar de un día para otro. Lo que sí te puedo decir es que ha habido menos masacres en este gobierno que en los anteriores.
Polemón: Sobre el libro, Magón, lo menciona mucho Andrés Manuel López Obrador en sus conferencias de prensa, se identifica mucho con el personaje, ¿ve usted algunos rasgos de Magón en el titular del Ejecutivo?
Armando Bartra: Yo me identifico mucho con el personaje, las 60 personas que estaban escuchando la presentación del libro se identifican mucho con el personaje, las personas que en el Zócalo escucharon la presentación del libro y de otros libros sobre Flores Magón, se identifican un chingo con el personaje. Todos mis alumnos en la escuela de Ciencias Sociales donde yo he dado clases, se identifican un chingo con el personaje. Me parece natural que el presidente de la República se identifique con el personaje, ¿tú no?
Muchos nos identificamos con este hombre que era un revolucionario que no tiraba tiros, que era un revolucionario que no andaba a caballo con las cananas que era un revolucionario que no hacía la guerra, sino un revolucionario que escribía, un revolucionario que publicaba periódicos, admirable, un revolucionario que ayudó a transformar este país sin que él en lo particular participara en la violencia en la lucha armada, como Zapata, como Villa, como Carranza, como Obregón.