Las plantas de generación de electricidad de Iberdrola que fueron adquiridas por el Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin) suministran luz eléctrica a más de 10,559 tiendas, supermercados, fábricas, establecimientos y oficinas.
Con la operación de venta al gobierno mexicano, los clientes que tiene Iberdrola pasarán a la CFE, pues ésta llevará la administración de las plantas.
Entre los clientes de mayor relevancia están Banco Afirme, Axtel, Bacardí Compañía, Bayer de México, Bepensa Bebidas, Bemis Packaging México, Bio Pappel, Scribe, Oxxo, Blackhawk de México, Carrizal Mining, Cebadas y Maltas, Cementos Apasco y Cemix.
Desde hace varios años, Iberdrola también le vende electricidad a Cervecería Cuauhtémoc Moctezuma, Centro de Servicio Diesel, Cervecería del Pacífico, Cervecería Modelo de Guadalajara, Cervecería Modelo de Torreón, Cervecería Modelo, Cesantoni, Clariant Productos Químicos, Comercializadora de Lácteos y Derivados, revela información en poder de Forbes México.
Otros clientes de la empresa española son Compañía Minera Autlán, Compañía Minera de Atocha, Conductores Monterrey, Continental Automotive Guadalajara México, Continental Tire de México, Costco de México, Cuprum, Dacomsa, Dbg México, Deacero, Dana de México Corporación, Decoplas, Denso Mexico, Embotelladora las Margaritas, Emerson Electric de Mexico.
También está Enertec México, Envasadoras de Aguas en México, Envases Universales de México, Fábrica de Harinas Elizondo, Food Service de México, Fricción y Tecnología, Grupo Gamesa, Grupo Kuo, Grupo Yazaki, Hotelera Palace Resorts, Ingredion México, Kimberly Clark de México, entre otras más.
La documentación presentada por Iberdrola México a la Comisión Reguladora de Energía (CRE) muestra que Iberdrola Energía Tamazunchale, una de las plantas privadas, conecta a más de 1,443 establecimientos, mientras que Iberdrola Energía Monterrey suministra a unas 3,834 oficinas y fábricas.
Iberdrola Energía Altamira conecta a más de 1,685 establecimientos, Iberdrola Energía La Laguna da electricidad a más de 1,791 negocios y Enertek surte luz eléctrica a 1,806 puntos.
Para la Comisión Federal de Electricidad (CFE) son de suma importancia los clientes industriales, pues es de donde proviene la mayor parte de su facturación, al ser grandes consumidores de energía; es por esto que uno de los objetivos durante esta administración es la recuperación de esos clientes.
Antes del acuerdo entre el gobierno mexicano e Iberdrola para la compra de 13 plantas, la relación entre ambos era tensa, incluso la empresa ibérica emprendió arbitrajes internacionales contra la CFE.
También la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) han puesto trabas para los permisos y pruebas de operación para plantas de Iberdrola, sin dejar de lado, que este gobierno la ha acusado en varias ocasiones de ser una de las empresas que presuntamente crearon un “mercado negro” de energía bajo la figura de autoabasto.
El año pasado, la CFE reveló que desde 2021 está trabajando en una estrategia para la recuperación de clientes que son suministrados por privados a través del autoabasto.
Con esta estrategia, estimó que entre 2021-2025 formalizará contratos por 800 MW, de los cuales 60% se contempla firmarlos antes de este año.
Esta administración le ha declarado la guerra a los esquemas de autoabasto y a los productores independientes de energía (PIE); estos segundos son la mayoría de plantas que el gobierno de México le está comprando a Iberdrola..
Respecto a los PIE, la CFE ha dicho que se les obliga a comprar energía mediante contratos por 25 años.
La CFE les paga los cargos fijos, incluso si sus centrales no son despachadas, tienen garantizada la recuperación de su inversión. Existen diversas cláusulas en los contratos mediante los cuales le trasladan todos los riesgos a la empresa productiva del Estado.
En tanto, a los privados bajo el modelo de autoabastecimiento los ha acusado de crear un mercado negro paralelo de electricidad con estas sociedades, lo que ha ocasionado una daño a la CFE por 10,000 millones de pesos al año, según el gobierno federal.
