La caída de la Casa Grande y el Núcleo Guerrillero Emiliano Zapata (Paréntesis): El asalto al tren
La noche del 14 de febrero de 1974, un tren que transportaba soldados del 9° Regimiento de Caballería de Atilixco, Puebla, y que provenía de dicho estado, fue asaltado en la localidad de Xalostoc, Estado de México, por el comando José Luis Pacheco Aragón, perteneciente a la Liga Comunista 23 de Septiembre.
La acción tenía como objetivo la obtención de armas de alto poder y municiones para equipar a los integrantes de la Brigada Revolucionaria Emiliano Zapata, el destacamento rural de la LC23S en Oaxaca. La planeación de la emboscada comenzaría en enero de 1974. Originalmente el comando estaría conformado por David Jiménez Sarmiento, Adolfo Lozano Pérez, Mario Domínguez Ávila, Lázaro Torralba Álvarez y José Luis Pacheco Aragón, sin embargo, el 4 de febrero de 1974 José Luis Pacheco Aragón caería en un enfrentamiento con elementos policíacos mientras se encontraba realizando una repartición del periódico Madera. Por esta razón, el comando que realizaría la emboscada es nombrado José Luis Pacheco Aragón, y José Luis Moreno Borbolla tomaría el lugar de Pacheco Aragón.
El plan consistiría en infiltrar cuatro elementos del comando dentro de los vagones de pasajeros, los cuales, una vez dentro del tren, tomarían posiciones para poder tomar de sorpresa a los elementos militares que custodiaban el tren, abatirlos rápidamente y poder expropiar el armamento y municiones que traían consigo. Moreno Borbolla, Jiménez Sarmiento, Lozano Pérez y Domínguez Ávila serían comisionados para tal fin.
Poco antes de llegar a la estación de Xalostoc, el comando entra en acción y rápidamente abre fuego contra a los soldados, abatiéndolos sin presentar resistencia, los despojan de los rifles FAL que portaban junto con sus respectivos cartuchos de munición y activan el freno de emergencia para detener el tren. Antes de huir con aerosol pintarían en una de las paredes del vagón «Liga Comunista 23 de Septiembre» reivindicando así la acción. Abajo, Lázaro Torralba Álvarez les espera a bordo de un vehículo que los sacaría del lugar de los hechos.
La ejecución de los soldados enciende la furia del ejército mexicano, quienes de inmediato despliegan un operativo militar en todo el Estado de México para dar con los responsables del asalto. Es en ese momento en el cual los militares se enteran que la Dirección Federal de Seguridad se encuentra en búsqueda de una casa de seguridad de las Fuerzas de Liberación Nacional. Creyendo que está organización está implicada en el asalto al tren, el ejército mexicano asume la dirección del operativo y despliega elementos militares en Nepantla, armados y listos para un enfrentamiento.
* Fuentes de Referencia:- El Fuego y el Silencio. Historia de las Fuerzas de Liberación Nacional Mexicanas: Adela Cedillo.- La Liga: Una Cronología: Alberto López Limón.