Economía

La economía de la campaña: peso fuerte, inversiones en auge y cautela hacia el 2025

Comentarios y análisis en el encuentro de Citigroup. La traducción electoral de los indicadores. El temor al mal momento de Pemex.

El comentario que se escuchó ayer jueves con fuerza en salones y pasillos del Hotel Presidente, en la asamblea de CitiBanamex, era casi unánime: Andrés Manuel López Obrador tiene blindada la economía del año electoral pero los primeros dos años del próximo sexenio serán de gran complejidad.

El diagnóstico, según compartieron a LPO asistentes al encuentro, explica el predominio de Claudia Sheinbaum en los sondeos porque el buen momento económico impacta especialmente en los sectores medios y bajos, donde está la fuerza electoral de Morena y donde la inseguridad y la violencia, que aparecen en el discurso opositor, ya son vistas como males endémicos que poco tienen que ver con quien gobierne.

«Como no seguimos las recomendaciones del FMI, o del Banco Mundial, la economía mexicana está creciendo, hay empleos, se ha incrementado el salario en términos reales más del 100%», dijo López Obrador durante su conferencia del pasado miércoles.

Uno de los elementos de los que más puede presumir el presidente es del «superpeso», que al arranque de las campañas electorales se mantiene cotizando por debajo de las 17 unidades por dólar. Un elemento determinante en las clases medias urbanas.

La economía creció 3.2% durante el 2023, por arriba de las expectativas

Vale recordar que durante el 2023 la divisa se apreció en 13% y si bien el 2024 enfrentará retos ante un posible recorte de tasas por parte de Banxico y el proceso electoral de Estados Unidos, en el mercado estiman que cierre el año en 18.50 pesos, de acuerdo con la última encuesta de Citibanamex.

La inversión es otra clave del momento económico. Lejos de los panoramas temidos a inicios del sexenio de López Obrador, no hubo fuga de capitales. Si bien se llegó a observar una caída en la tenencia de bonos extranjeros, las cifras apuntan a una recuperación de estos capitales.

La inversión extranjera directa no se detuvo, por el contrario, el 2023 tocó un nuevo máximo histórico de flujos, al registrarse poco más de 36 mil millones de dólares, que significó un crecimiento anual de 2.2%. Aunque vale decir que poco de estos flujos se debió a nuevas inversiones, pues tres cuartas partes de ese monto se concentró en reinversión de utilidades.

Por otro lado, la inversión fija bruta sorprendió con su mayor alza en 30 años. Al cierre de 2023 consolidó un crecimiento anual de 19.68%, apoyado principalmente por la recuperación del sector automotriz y por la construcción, principalmente por las obras públicas realizadas por este gobierno y otras del sector privado.

La economía de la campaña: peso fuerte, inversiones en auge y cautela hacia el 2025

¿Y cuáles son las señales de cautela hacia el 2025?  Para el último trimestre del año pasado se observaron algunas señales de desaceleración, una tenencia que los expertos estiman que prevalecerá a lo largo del año, pues se estima que este año la economía estadounidense tenga un menor crecimiento.

Hay otros indicadores que reflejan  deterioro. Uno de ellos es la cartera vencida de hogares, que en enero alcanzó un nivel máximo, marcado por la cuesta de enero y las altas tasas de interés. Así, el saldo de la cartera vencida de los prestamos que otorgan los bancos a los hogares mexicanos se situó en 79,693 millones de pesos en el primer trimestre de este año, un cinremento anual, en términos nominales, de 21.6%.

Y hay dos elementos fundamentales que generan preocupación a futuro: las finanzas públicas y Pemex.

El alto déficit que planteó Rogelio Ramírez de la O para el cierre del sexenio de AMLO requerirá un fuerte ajuste para el próximo sexenio, en caso de querer regresar a la disciplina fiscal. En enero de este año el déficit público registró un incremento de 385%.

El escenario se complica con la carga fiscal que representa Petróleos Mexicanos. Una empresa que López Obrador insiste en rescatar y apoyar con capital. Si bien la deuda de la petrolera se ha logrado reducir en este sexenio -disminuyó en 17.4% en 2023- su pasivo es de 1,794.7 mil millones de pesos, que supera la utilidad que registró ese año por 106,900 millones.

Además, la producción petrolera no logra repuntar y al cierre del año pasado tuvo una caída de 5.8%, al registrar un millón 855 mil barriles. Octavio Romero Oropeza repite que esta administración ha estabilizado la producción, sin embargo, los datos son contundentes y no ha logrado convencer al mercado sobre su modelo de negocios. 

Editor

Medio independiente de noticias relacionadas con la Cuarta Transformación de México.

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