Figuras del Partido Acción Nacional llevan a cabo una agresiva estrategia digital que recuerda a la que en su momento implementó el expresidente estadounidense Donald Trump, centrada en la controversia y la polémica, con tal de posicionarse ante el presidente Andrés Manuel López Obrador, así esto signifique dar un paso más a la derecha del espectro político.
El 1 de diciembre de 2021, la dirigencia nacional del PAN se reunió con legisladores federales y locales para discutir la estrategia digital con la que buscan “disputar y ganar en redes sociales el debate y la controversia pública para contener y derrotar al populismo”, según manifestó en Twitter el diputado federal Gabriel Quadri.
El excandidato -y ahora aspirante- presidencial es una de las figuras más polémicas de esta estrategia digital, pues desde sus redes sociales tilda al primer mandatario de “autócrata” y “Calígula” o descalifica a empresarios y opositores que buscan dialogar, postura que comparte con la senadora Lilly Téllez, quien también gusta de amedrentar a los funcionarios del Gobierno federal.
Quadri ha llegado a asegurar que López Obrador buscará “eternizarse” en el poder, desconociendo los resultados de 2024, y que el daño que ocasiona “es mucho mayor” que el de la insurrección violenta de seguidores de Trump el 6 de enero de 2020, cuando tomaron el Capitolio estadounidense para tratar de impedir el certificado de Joe Biden como presidente.
Para analizar la estrategia digital del PAN, Reporte Índigo entrevistó a Alejandro Rosas Marín, fundador de la consultora Disruptio, quien recuerda que el éxito de Trump fue radicalizar el discurso público y “dar permiso” a un sector de la población de volver a hablar públicamente de ciertos temas políticamente incorrectos.
“Cuando vieron a un líder que hablaba sin ningún tapujo, sin autolimitación, abarcó un buen sector a su favor, tanto que ganó la presidencia. Un poco el fenómeno se querrá repetir, no sé si sea la intención del PAN imitar la estrategia de Donald Trump, pero queda claro que están radicalizando su discurso”.
Al carecer de un proyecto alternativo de gobierno, los partidos de la oposición se han decantado por los insultos y las descalificaciones para tratar de promover sus propios proyectos políticos
En ese sentido apunta que “no es una coincidencia que este año lo inició Acción Nacional con más ataques y más beligerancia, es parte de una estrategia”. Si bien señala que Twitter, su principal plataforma de ejecución, no solo es cuestionada por el alto número de bots que la manipulan, sino que también ha venido perdiendo usuarios en México.
Considera que se trata de “más de lo mismo” por parte del PAN, por lo que solo incrementarán la intensidad en los descalificativos y ataques hacia López Obrador, Morena y su proyecto. Lo que, si bien puede sumar algunos votos adicionales de quienes se opongan o duden del actual gobierno, no serían suficientes para ganar próximas elecciones.
“El PAN, si no va por una estrategia digital más inteligente, más de lo mismo no le va a dar mejores resultados”.
En esto coincide la doctora Ivonne Acuña Murillo, académica del Departamento de Ciencias Sociales y Políticas de la Universidad Iberoamericana, quien comenta a Reporte Índigo que la primera fuerza opositora solo está siguiendo con su campaña en contra de López Obrador, pero esta vez bajo la desesperación de sus recientes derrotas electorales.
“No tienen un proyecto alternativo, ni el PAN, ni el PRI, ni el PRD. Entonces se van por estas estrategias efectistas con las que buscan asustar a la población, a un sector, porque la gran mayoría no les cree. En las redes podemos ver cómo se burlan con memes, los insultan. No sé por qué insisten por tomar ese camino”.
Incluso considera que con esta estrategia, el PAN “lo que hacen es abrirse y mostrar su verdadero rostro”.
“Están siguiendo la máxima de la publicidad: ‘que se hable de ti, aunque sea mal, pero que se hable’. Estar a como dé lugar siendo objeto de comentarios, de respuestas, de debates. Sobre todo en Twitter, esta red donde justamente se dan los enfrentamientos más álgidos, a veces con argumentos, pero la mayoría con insultos y descalificaciones”
Por Ivonne Acuña Murillo