Trump castiga a su propia economía con aranceles a México: Una medida que le costará muy caro

La decisión de Donald Trump de imponer un arancel del 25% a todos los productos importados desde México y Canadá ha sido recibida con críticas generalizadas, no solo desde el gobierno mexicano, sino también dentro de Estados Unidos. Esta medida, que entrará en vigor el 1 de febrero de 2025, busca presionar a sus vecinos para que implementen acciones más estrictas contra la migración y el tráfico de fentanilo. Sin embargo, la principal víctima de esta decisión no será México, sino los propios consumidores y empresas estadounidenses.
Desde que México se convirtió en el principal socio comercial de Estados Unidos en 2023, las economías de ambos países han estado estrechamente entrelazadas. Con más de 400 mil millones de dólares en exportaciones anuales de México a EE.UU., la imposición de estos aranceles no solo encarecerá los productos esenciales para la industria estadounidense, sino que también debilitará la competitividad de sus empresas en el mercado global.
El secretario de Economía de México, Marcelo Ebrard, enfatizó que «si se llegara a imponer este arancel del 25%, los precios de productos básicos en Estados Unidos, como autos, computadoras y electrodomésticos, se dispararán de inmediato, afectando directamente a las familias trabajadoras». En efecto, el consumidor estadounidense será quien pague el precio de la política proteccionista de Trump.
Analistas económicos advierten que esta medida podría desatar una recesión en sectores clave de la economía estadounidense. La Asociación Nacional de Fabricantes de EE.UU. ha manifestado su preocupación, advirtiendo que el costo de los aranceles «pondrá en riesgo miles de empleos y reducirá el crecimiento económico». El sector automotriz, altamente dependiente de piezas y ensamblaje en México, verá aumentar sus costos de producción, lo que podría traducirse en una caída de la demanda y recortes de personal en fábricas estadounidenses.
El golpe más fuerte para Estados Unidos podría darse en el sector agrícola y de alimentos. Según un reporte de la plataforma Eater, aproximadamente el 15% del suministro de alimentos en EE.UU. proviene de importaciones, siendo México y Canadá sus principales proveedores. Con los aranceles, los precios de frutas, verduras y productos básicos subirán hasta un 3%, afectando desproporcionadamente a las familias de bajos ingresos.
Mientras tanto, México se prepara para minimizar los daños. Si bien el impacto inicial será significativo, el gobierno mexicano ya explora nuevas oportunidades comerciales con mercados emergentes en Asia y Europa. «Tenemos una economía fuerte y diversificada, no podemos depender de una relación comercial volátil con un país que castiga su propia economía», declaró un alto funcionario de la Secretaría de Economía. En este sentido, la política de Trump podría acelerar la diversificación de los mercados mexicanos, reduciendo la dependencia de EE.UU. a mediano plazo.
En el plano político, la decisión de Trump también podría costarle caro. Aunque su base republicana celebra su retórica proteccionista, varios sectores del Congreso, incluidos miembros de su propio partido, han mostrado preocupación por los efectos adversos de esta política. Organizaciones empresariales y cámaras de comercio han advertido que la medida podría provocar una crisis de suministro e incentivar represalias comerciales de México y Canadá.
SE acuerda acciones con la IP ante aranceles

México, por su parte, se mantiene firme y preparado para defender sus intereses. Con una economía más resiliente y una creciente relación comercial con otras potencias, la apuesta de Trump podría convertirse en un búmeran que golpeará con más fuerza a Estados Unidos que a su vecino del sur.
Ante una inminente aplicación de aranceles a México, el titular de la Secretaría de Economía (SE), Marcelo Ebrard Casaubón se reunió con Francisco Cervantes Díaz, dirigente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
De acuerdo con un mensaje publicado en la cuenta de la red social X, el funcionario sostuvo el encuentro con el líder del sector privado “para coordinar acciones en estos próximos días”.
Tanto el gobierno federal como la iniciativa privada trataron el tema de la posible entrada en vigor de los aranceles a las exportaciones mexicanas a partir de este sábado, luego de que la vocera de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, reiteró que se aplicará esta medida a los socios del T-MEC.
El área de comunicación social de la SE confirmó que Ebrard Casaubón solicitó a los diputados de Morena suspender su participación en la reunión plenaria prevista para este viernes, pues se encuentra atendiendo “la coyuntura comercial internacional”.
“Hoy, como toda la semana, ha participado en reuniones encabezadas por la presidenta Claudia Sheinbaum relacionadas con el referido tema”, agregó.